Los cultivos de temporal se encuentran en la fase final de su ciclo agrícola, en una etapa determinante para el desarrollo de las plantas y la formación del grano. Así lo informó el delegado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Benjamín Carrera, quien destacó que la continuidad de las lluvias será clave para garantizar una cosecha favorable.
Carrera explicó que los sembradíos de temporal atraviesan actualmente la última fase vegetativa, considerada crucial para el llenado del grano. “Estamos en las etapas finales, donde la humedad del suelo y las precipitaciones juegan un papel fundamental para que los cultivos logren su máximo potencial”, detalló.
El funcionario recordó que este tipo de siembras dependen directamente de la temporada de lluvias, por lo que la incertidumbre del clima siempre genera preocupación entre los productores. Sin embargo, aseguró que hasta el momento las condiciones han sido positivas, ya que se han mantenido precipitaciones en diferentes regiones del estado.
“Que siga lloviendo es una buena noticia”, expresó el delegado, al subrayar que todavía se espera la llegada de más lluvias en lo que resta del mes. Dichas precipitaciones, añadió, permitirán que los cultivos completen su desarrollo en condiciones adecuadas y se reduzcan los riesgos de pérdidas.Los productores del campo han seguido con atención el comportamiento del clima, pues saben que en estas semanas se define en gran medida el rendimiento de las cosechas. “Es el momento en que la planta necesita mayor apoyo de la naturaleza”, señaló Carrera.
A pesar de que los cultivos de riego han avanzado con mayor estabilidad, los de temporal todavía requieren del acompañamiento climático. El delegado enfatizó que, en caso de que las lluvias persistan, se podrá hablar de un ciclo agrícola exitoso, lo cual se reflejará en la economía de las comunidades rurales.
La importancia de los cultivos de temporal radica en que constituyen una parte esencial de la producción agrícola regional, tanto para el autoconsumo como para la comercialización. De ahí la relevancia de que cierren su ciclo con buenos resultados, lo cual depende en gran medida de la regularidad de las lluvias.
Finalmente, Carrera reiteró que la Sader continuará dando seguimiento a la evolución de los cultivos en el estado, confiando en que la naturaleza siga favoreciendo al campo. “Estamos en las etapas críticas, pero mientras continúe lloviendo, hay confianza en que la cosecha será buena”, concluyó.