Ciudad de México.- Yuki Tsunoda debutará como piloto formal de Red Bull en su casa, en el Gran Premio de Japón el primer fin de semana de abril y eso es quizá uno de los primeros contras que tiene en la que será su primera carrera al lado del campeón defensor de F1, Max Verstappen.
Más allá del acoplamiento que pueda tener con el RB21, el piloto japonés tendrá la presión encima de los directivos de Red Bull ya que esperan haga olvidar pronto el pobre desempeño que tuvo Liam Lawson en las dos primeras fechas de la temporada, en Australia y China. Y es que los de Milton Keynes tienen la consigna de retener el Campeonato de Pilotos y recuperar el de Constructores.Tsunoda, de 24 años, compensará esa situación con su talento y la disciplina que caracteriza a los japoneses, cualidades por las que fue considerado desde un principio como el sustituto ideal del mexicano Sergio Pérez, aunque los de Milton Keynes se inclinaron por Liam Lawson. Sin embargo, en momentos de alto estrés, la frustración lo desborda y tiende a externarla por la radio a los ingenieros.El japonés está en la máxima categoría desde 2021 y por ello entiende perfectamente la dinámica de los Grandes Premios, aunque las condiciones en las que correrá ahora no son las mejores para un piloto joven que ha tenido un buen crecimiento a decir de Racing Bull y Red Bull. Sin embargo, nunca ha alcanzado un podio.
Un factor en contra que tiene Tsunoda es que Honda, su principal patrocinador, perderá peso cuando Red Bull cambie a Ford como proveedor de motores en 2026.