Xóchitl Gálvez, candidata presidencial por el Frente Amplio por México, ha enfocado su campaña en la crítica a la gestión actual del país, con especial énfasis en la corrupción, la seguridad y las políticas sociales. A través de sus conferencias, Gálvez ha prometido un cambio basado en el diálogo y la inclusión, resaltando la importancia de la participación ciudadana en la política. Su compromiso con la igualdad y el desarrollo sustentable, junto con su promesa de mantener y ampliar los programas sociales, marcan la dirección de su propuesta electoral.
Gálvez critica la estrategia de seguridad “abrazos, no balazos” y la política económica actual, llamando a la unidad y al esfuerzo conjunto para superar los retos del país. Su rechazo a la corrupción y su intención de mejorar las condiciones de vida a través de mayor transparencia y políticas inclusivas subrayan su visión de un futuro donde todos los sectores de la población, especialmente las minorías y los desfavorecidos, sean considerados. Su campaña se presenta como una alternativa de cambio real, con un enfoque en soluciones prácticas más allá de las divisiones ideológicas
